Merkel
recuerda a “patriotas” que intentaron matar a Hitler
“Hay
momentos en que la desobediencia es obligatoria”, dijo la canciller, en un acto
que marcó el debut público de la nueva ministra de Defensa, Annegret
Kramp-Karrenbauer.
La
canciller de Alemania, Angela Merkel, rindió un homenaje este sábado
(20.07.2019) a los miembros de la conjura militar que el 20 de julio de 1944,
hace exactos 75 años, intentaron asesinar a Adolf Hitler. La autoridad germana calificó
como “patriotas” a quienes organizaron el atentado, a los que ensalzó por
haber actuado movidos por la “obligación a desobedecer” a la dictadura
nazi.
“Hay
momentos en que la desobediencia es obligatoria”, apuntó Merkel durante la
ceremonia, realizada ante 400 nuevos reclutas del Ejército alemán, ensalzando
la figura del coronel Claus Schenk von Stauffenberg, autor material del fallido
atentado (consistente en la instalación de una bomba en una sala de reuniones de
la Guarida del Lobo, uno de los cuarteles militares
de Hitler) y rostro más visible de la conjura, conocida como “Operación
Valkiria”.
La
canciller llamó a “cuidar su memoria para que las lecciones de la historia
no se desvanezcan” y recordó que el “derecho a la resistencia” en
defensa del orden democrático está contemplado en la Constitución alemana,
redactada cinco años después de la Capitulación del Tercer Reich, que se rindió
ante los aliados en mayo de 1945.
Figura controvertida
En
la ceremonia también participó la nueva ministra de Defensa de Alemania,
Annegret Kramp-Karrenbauer, quien asumió esa cartera en reemplazo de Ursula von
der Leyen, quien asumirá en noviembre al frente de la Comisión Europea.
Kramp-Karrenbauer destacó que quienes participaron del intento de asesinato
“fueron soldados modelos que se levantaron contra la tiranía”.
Stauffenberg es considerado un héroe de la oposición a Hitler surgida en la cúpula militar, mientras que los hermanos Sophie y Hans Scholl, dos estudiantes miembros del grupo Die Weisse Rose -La Rosa Blanca-, guillotinados en 1943, simbolizan la resistencia social. La figura de Stauffenberg genera controversia, pues algunos lo tachan de traidor, mientras otros sostienen que los conjurados no actuaron movidos por el horror ante la monstruosidad del nazismo, sino frustrados ante el discurrir de una guerra que veían perdida.
HÉROES FAMOSOS Y ANÓNIMOS: QUIENES RESISTIERON A HITLER
Exposición revive la historia de Michel Nash, el
conscripto que se rebeló en dictadura
Michel
Nash, mi hermano. Ese es el nombre de la
exposición que, hasta el 26 de julio se presentará en la Municipalidad de
Recoleta. La muestra comprende diversas imágenes que dan cuenta de la vida del
militante comunista que, siendo conscripto, se opuso a la violencia ejercida
por los militares.
Abril Becerra
Lunes 1 de julio 2019 18:23 hrs.
La vista fija. Despeinado y con
una sonrisa leve, contenida. Así luce Michel Nash en una de las imágenes
incluidas en la exposición que, recientemente, inauguró la Municipalidad de
Recoleta en su honor y que podrá visitarse hasta el 26 de julio en el primer
piso del municipio.
Se trata de la muestra Michel Nash, mi hermano, que
nació a partir de un trabajo en conjunto entre la familia Nash-Sáez, la
Asociación de Fotógrafos Independientes de Santiago (AFI) y el Colectivo
Memorial de Recoleta.
La exposición surgió en el marco
de la conmemoración del aniversario número 65 del joven militante comunista,
quien, al momento del Golpe de Estado, se desempeñaba como conscripto. En ese
contexto, Nash se habría negado a dispararle a sus compañeros militantes, por
lo que fue dado de baja y llevado hasta el campo de prisioneros de Pisagua.
Entonces, tenía 19 años.
Paula Moraga, directora de la
Corporación Cultural de Recoleta, indicó que la muestra responde a la necesidad
de generar una línea de trabajo respecto del rescate de la memoria.
“Para nosotros su figura es fundamental, entrañable. Primero, porque Michel Nash fue un joven de esta comuna y, hasta hoy, su ejemplo nos enseña un camino a seguir: el de la verdad y la justicia respecto de haberse rebelado en contra de la autoridad a pesar de sus pocos años”, dijo.
Las imágenes presentes en la
exposición fueron seleccionadas por las fotógrafas de AFI, Marcela Araya y
Marucela Ramírez. Ambas abordaron el archivo fotográfico de la familia Nash-
Sáez para descubrir la vida íntima del joven comunista: a través de ese
ejercicio conocieron a una persona que iba más allá del mito de su muerte.
Desde ahí, ambas decidieron
plantear, en la muestra, una línea curatorial basada en la vida de Nash.
“Quisimos orientar la exposición
para celebrar su vida, el tiempo que lo pudimos tener con nosotros”, sostuvo
Marucela Ramírez.
Además, la fotógrafa agregó
que la exposición cruza diversos hechos que permiten contextualizar la vida de
Nash.
“La muestra narra todos los acontecimientos políticos, tanto en Chile como en el lado árabe, porque su familia es descendiente de sirios. Entonces, están todos los hitos que lo marcaron, desde que nació hasta 1973”.
Por su parte, Marcela Araya
indicó que las fotografías debieron ser restauradas para su presentación.
“El archivo fotográfico era
enorme porque, a diferencia de muchas familias, tenían mucho material, desde
que era bebé, hasta los 18-19 años, cuando parte al Ejército. Entonces, ahí
empezamos a seleccionar fotos, ver qué era lo más importante e intentar también
hacer una línea de tiempo para mostrar las diferentes etapas de su vida”.
“Ahí había fotos en diferentes
estados. Entonces, hicimos la restauración, eliminando un poco las manchas que
había. Fue un trabajo bien de chino, punto por punto, arreglando la foto para
que estuvieran de la mejor calidad posible”, comentó.
El caso
Michel Nash nació en 1954 y vivió
gran parte de su adolescencia en la zona de Santos Dumont en Recoleta. Ingresó
al Partido Comunista a muy temprana edad, influenciado por su padre, quien
también era militante. Cuando cumplió 18 años fue llamado a presentarse al
Servicio Militar en el Regimiento Granaderos N°2 de Iquique.
Al momento del Golpe de Estado se
negó a participar en los allanamientos en la zona. Inmediatamente fue
trasladado, junto a otros detenidos, a Pisagua. Posteriormente, el 29 de
septiembre de 1973 fue ejecutado junto a otros cinco prisioneros.
Luego de años de búsqueda de
justicia, en 2016, el ex brigadier Alfonso Videla fue condenado a siete años de
presidio efectivo por su muerte. No obstante, su cuerpo del joven aún está
desaparecido.
Leila Nash, su hermana, se ha encargado de conservar su memoria.
La Mesa de Cultura, Memoria y Derechos Humanos de la Región de Valparaíso, creada en 2014, está integrada por organizaciones de la Sociedad Civil ( principalmente de sobrevivientes y familiares de víctimas de la dictadura cívico militar) e instituciones ligadas a la gestión de espacios y sitios de memoria, cuyo objetivo es focalizar la transmisión de memoria histórica y contribuir a la no repetición de los atroces sucesos vividos generando una cultura basada en el irrestricto respeto a los derechos humanos. Para el «Nunca Más» la identificación, señalamiento y. resignificación de los espacios y sitios de memoria constituyen un soporte indispensable para que las comunidades y especialmente las nuevas generaciones se apropien de estos espacios mediante acciones culturales y de arte.
La Mesa de Cultura, Memoria y Derechos Humanos de la Región de Valparaíso, creada en 2014, está integrada por organizaciones de la Sociedad Civil ( principalmente de sobrevivientes y familiares de víctimas de la dictadura cívico militar) e instituciones ligadas a la gestión de espacios y sitios de memoria, cuyo objetivo es focalizar la transmisión de memoria histórica y contribuir a la no repetición de los atroces sucesos vividos generando una cultura basada en el irrestricto respeto a los derechos humanos. Para el «Nunca Más» la identificación, señalamiento y. resignificación de los espacios y sitios de memoria constituyen un soporte indispensable para que las comunidades y especialmente las nuevas generaciones se apropien de estos espacios mediante acciones culturales y de arte.
Organizaciones que componen la Mesa Regional de Cultura, Memoria y Derechos humanos – Valparaíso:
Agrupación de exPresas y exPresos Políticos V Región (AexPP V Región) – aexpp_v@yahoo.es
Organizaciones de DD.HH. se manifiestan ante el zarpe de la Esmeralda y
solicitan que se transforme en un memorial flotante Destacado
By Guillermo Correa Camiroaga Junio 10, 2019
Foto: Guillermo
Correa Camiroaga
Organizaciones
de Derechos Humanos de la V Región, convocados por la Agrupación Amigos del
sacerdote Miguel Woodward, se reunieron la mañana del domingo 9 de junio
en el Muelle Prat de Valparaíso, con motivo del zarpe del 64° crucero de
instrucción del Buque Escuela Esmeralda, para denunciar las violaciones a los
derechos humanos que se cometieron a bordo de este barco, el que fue utilizado
después del golpe de Estado de 1973 como un centro de detención y tortura.
En sus
intervenciones exigieron que la Armada de Chile termine con el pacto de silencio
que permite que hasta el día de hoy sigan impunes crímenes de lesa humanidad.
Asimismo agregaron que:“La Esmeralda, ese barco que está allá, debería
ser un viajero de la verdad y la justicia, un centro de memoria flotante
que promocione los derechos humanos, que diga que en Chile nunca más se va a
encarcelar, se va a torturar, ni se va a asesinar a chilenos y chilenas por
pensar distinto. Es barco debería viajar por el mundo diciéndole a todo aquel
que suba a él que sentimos vergüenza por lo que sucedió en su interior. “
Con lienzos y pancartas, mientras desde el molo de abrigo zarpaba la Esmeralda, los y las manifestantes congregados en el muelle Prat realizaron un acto de protesta y denuncia, bajo la consigna “La Esmeralda: ni blanca, ni pura, fue centro de tortura”.
Javier
Rodríguez, integrante de la Agrupación Amigos de Woodward, al hacer uso de la
palabra manifestó:
“Estamos aquí un año más ante el zarpe del Buque Escuela Esmeralda para demostrar nuestra indignación por las atrocidades y violaciones a los derechos humanos que fueron realizadas a bordo de este barco. Mujeres y hombres chilenos fueron torturados arriba de este buque. En su cubierta murió un sacerdote llamado Miguel Woodward, un cura obrero. La Armada ha ocultado todos sus antecedentes, mostrando la cobardía de la Armada que no es capaz de reconocer lo que hizo. Creemos que el Buque Escuela Esmeralda no es una embajadora, ya que para nosotros fue un centro de tortura.”
Por su
parte, Gladys Barrios, integrante de la Agrupación de Familiares de Ejecutados
Políticos, cuyo hermano, Marcelo Barrios, fue asesinado por un contingente de
infantes de marina el año 1989, expresó lo siguiente:
“Nos encontramos aquí nuevamente para gritar fuerte
y valientemente que nosotros no olvidamos y tampoco perdonamos. No olvidamos a
nuestros familiares, a nuestros amigos, a nuestros padres, no olvidamos a un
pueblo que fue encarcelado, un pueblo que fue torturado, que fue hecho
desaparecer, un pueblo que fue perseguido sistemáticamente con toda la fuerza,
con todo el poder y con todo el odio que este Estado Terrorista arrojó sobre
ellos. Nosotros estamos exigiendo verdad, justicia, estamos exigiendo en este
momento simbólico, en que el barco tortura Esmeralda zarpa, para pedirle a la
Armada que de una vez por todas entregue todos los antecedentes, entregue a los
criminales de lesa humanidad. Basta de cobardía. Pensamos que la Armada chilena
no tiene honor ni gloria, ya que sigue protegiendo y amparando a asesinos y
torturadores”
Otra
integrante de las organizaciones de derechos humanos presente en esta
actividad, hizo uso de la palabra para denunciar y hacer visible los abusos
sexuales cometidos por funcionarios del Estado en contra de niñas y
mujeres, una situación que ha quedado bastante oculta. En parte de su
intervención manifestó:
“Soy una mujer de una generación joven aún que no puede vivir tranquila en este país donde la impunidad aún se mantiene. Debemos luchar por justicia, por la memoria viva trasmitiendo a las nuevas generaciones lo que pasó hace pocos años en nuestro país. Los que estamos aquí somos sobrevivientes del horror, aquí no estamos contando historias, estamos contando nuestras experiencias de vida y la de nuestros familiares, estamos contando historias que nos sucedieron, de primera fuente. El barco que en estos momentos está zarpando es un lugar en donde estuvieron prisioneras personas chilenas, las que fueron torturadas y abusadas sexualmente por funcionarios del Estado chileno. Como mujeres debemos luchar contra cualquier forma de patriarcado violento, más aún cuando viene desde el propio Estado, el que permitió que hombres abusaran de los cuerpos de niñas, de mujeres embarazadas a las que luego les quitaron sus hijas. Nosotras no necesitamos solo de memoriales donde recordemos el horror, necesitamos que se haga justicia, que haya verdad y se termine con la impunidad. Hago un llamado a los uniformados y uniformadas chilenas que hoy están acá para decirles que si quieren sentirse orgullosos y orgullosas del uniforme que llevan, exijan a sus instituciones que entreguen los nombres de los violadores y asesinos que todavía siguen protegiendo con su silencio cómplice.”
Una vez que el Buque Escuela Esmeralda zarpó desde el molo de abrigo, el grupo de manifestantes marchó desde el Muelle Prat hacia la Plaza Sotomayor, pasando por el costado del monumento a los Héroes de Iquique y por el lado de dos ferias presentes en la plaza, donde había un gran número de público, el que se detenía a escuchar las consignas y observar el paso de la marcha.
La
actividad concluyó con un pequeño acto de protesta en el frontis del edificio
de la Comandancia de la Primera Zona Naval, lugar en donde volvieron a
expresar lo planteado en el muelle, ante las miradas y oídos atentos de una
pareja de marinos que se encontraban de guardia en la puerta del edificio
institucional.
Guillermo
Correa Camiroaga, Valparaíso 9 de junio 2019
Juez condena a exuniformados por tortura y asesinato de ciudadano español en Valparaíso en 1977
El Clarín de Chile Mayo 30, 2019
Academia de Guerra Naval
El ministro en visita extraordinaria para causas por
violaciones a los derechos humanos de la Corte de Apelaciones de Valparaíso,
Jaime Arancibia Pinto, condenó al exmiembro de la Armada y Carabineros, por su
responsabilidad en los delitos de aplicación de tormentos y homicidio
calificado del ciudadano español Enrique López Olmedo. Ilícitos perpetrados en
noviembre de 1977, en el sector de Playa Ancha de la ciudad.
En el fallo, el ministro Arancibia condenó al capitán
de fragata en retiro Alberto Roque del Sagrado Corazón Bobadilla Grillo y al
teniente coronel (r) de Carabineros Pedro Luis Alcayaga Zúñiga a las penas
efectivas de 12 años y 541 días de presidio, en calidad de autores de los
delitos consumados de homicidio calificado y aplicación de tormentos,
respectivamente.
En tanto, el retirado capitán de navío Gastón Eugenio
Silva Cañas fue condenado a 5 años de presidio, con el beneficio de la libertad
vigilada intensiva por igual lapso, como encubridor del homicidio calificado.
En la etapa de investigación de la causa, el ministro
en vista logró establecer que: “El día 11 de noviembre de 1977, la
víctima, Enrique López Olmedo, de nacionalidad española, es detenido por agente
del CIRE de la Armada de Chile, en un operativo (ratonera) realizado en el
domicilio de un familiar de éste, ubicado en el sector de Playa Ancha de
Valparaíso. En dicho lugar, luego de su detención, Enrique López Olmedo es
amarrado a una silla y con la vista vendada es interrogado y torturado por sus
captores durante tres horas aproximadamente”.
“Después de ello es sacado de la casa y llevado
por los agentes del CIRE en dirección desconocida, ya con evidentes signos de
maltrato y a continuación, a unas cuadras de la casa, es acribillado por los
agentes que habían participado en esa operación, siendo a continuación
trasladada la víctima a la Academia de Guerra Naval en donde funcionaba el
CIRE, siendo finalmente llevado al Hospital Naval de Valparaíso, llegando
fallecido a ese centro hospitalario, determinándose que la causa de su
fallecimiento fue por anemia aguda”.
Tras un largo proceso, se inaugura memorial en Tejas Verdes: aquí nació la DINA
Publicado el 28 Mayo 2019
ESCRITO POR GUILLERMO CORREA CAMIROAGA
La
“Enredadera de la Memoria” extendió sus ramas de dignidad en el frontis de la
Escuela de Ingenieros Militares de Tejas Verdes, regimiento que para el 11 de
septiembre de 1973 estaba al mando del Coronel Manuel Contreras Sepúlveda,
quien fue el creador e impulsor de la siniestra Dirección de Inteligencia
Nacional (DINA).
Este
recinto militar constituye la cuna de este organismo represivo y junto con el
Campo de Concentración de Rocas de Santo Domingo, se transformaron en la
escuela de formación de los torturadores y criminales que acometieron horrendas
violaciones de los Derechos Humanos en contra de miles de chilenas y chilenos.
También
fue en la provincia de San Antonio donde se realizaron los primeros “vuelos de
la muerte”, arrojando al mar y haciendo desaparecer a los militantes del MIR
Ceferino Santis, Gustavo Farías, Florindo Vidal, y al militante Socialista Luis
Norambuena .
Los brotes
de la Enredadera de la Memoria continúan extendiendo sus ramas en distintos
Sitios de Memoria de la V Región, y este Memorial de Tejas Verde-San
Antonio es el décimo Sitio de Memoria señalado, que
permite dejar un testimonio histórico del horror que ocurrió en estos lugares
durante la dictadura cívico-militar.
La
dignidad de los y las sobrevivientes, la dignidad de las y los luchadores
sociales y militantes políticos que fueron ejecutados, asesinados, hechos
desaparecer, como asimismo la dignidad y la lucha que continúan desarrollando
sobrevivientes, familiares e integrantes de organizaciones de Derechos Humanos
para mantener viva la lucha por la Verdad, por la Justicia y el castigo a los
culpables y de esta manera impedir la Impunidad, quedó materialmente plasmada
con esta obra del artista porteño Leandro Silva, instalada en la plaza que se
ubica frente al Regimiento Tejas Verdes.
La
Fundación por la Memoria de San Antonio y la Mesa Social de Memoria, Cultura y
Derechos Humanos de la V Región, con el apoyo del Ministerio de las Culturas,
las Artes y el Patrimonio, inauguraron este nuevo Memorial en el sector de
Tejas Verdes, localidad de Llo-Lleo, comuna de San Antonio, el día sábado
25 de mayo 2019, con un acto artístico-testimonial que contó con la presencia
de sobrevivientes de estos campos de detención, tortura, muerte y
desapariciones; familiares de víctimas de la represión, integrantes de
organizaciones de Derechos Humanos, vecinos y vecinas de San Antonio, como
también con el Jefe de la sede de Valparaíso del Instituto Nacional de
Derechos Humanos, Fernando Martínez, Carolina Arce, en representación de
la Seremi de las Culturas y las Artes, y la Diputada Camila Rojas,
representante del Distrito 7 que incluye la Comuna de San Antonio
Juan
Olivares Meza, Periodista, fue el conductor de esta actividad y al dar inicio a
la misma expresó:
“Nos reunimos en este lugar con la responsabilidad de
recordar, de reflexionar y con nuestra convicción profunda de mantener viva la
memoria. Porque finalmente este Memorial que estamos a punto de inaugurar, debe
convertirse en un recuerdo imperecedero de la dignidad de las familias, de los
cuerpos, de las vidas y de los sueños que en este mismo lugar fueron
arrebatados. También ha de ser este espacio una huella latente de las
desapariciones, de las muertes y las torturas sistemáticas a las que fueron
sometidos y sometidas hombres y mujeres, “cuya culpa” fue creer en una sociedad
distinta.
Y precisamente por las razones que aquí invocamos, no
podemos pasar por alto que resulta por lo menos paradigmático que mientras
instalamos en el frontis de este Regimiento una Placa que recuerda la
implementación de la tortura, la muerte y la desaparición de personas, como un
mecanismo de represión de la dictadura cívico-militar en este Regimiento, en el
Cuartel N°2 de Prisioneros y en el Balneario Popular de Santo Domingo, que
estuvieron al mando de Manuel Contreras, condenado a más de 500 años de cárcel por
violaciones a los Derechos Humanos, a pocos metros de donde estamos, en el
patio y salas de este Cuartel Militar, al igual que en la Academia de Guerra
del Ejército, existan cuadros y fotografías homenajeando al criminal.
Terminar con estas dualidades es una tarea pendiente y
urgente.
San Antonio, nuestro puerto, es un ícono triste de la
represión política y la violación a los Derechos Humanos durante la dictadura
cívico-militar. En el lugar donde nos encontramos se constituyó el Triunvirato
Experimental de Manuel Contreras, que operó desde el 11 de septiembre de 1973 y
se extendió durante los primeros años del régimen de facto. Esa trilogía
nefasta estuvo compuesta por el Balneario Popular Rocas de Santo Domingo,
convertido en centro de detención, tortura y desaparición, donde recibieron
instrucción quienes se convirtieron en integrantes activos de la
Dirección de Inteligencia Nacional (DINA); el Campamento de Prisioneros N°2,
ubicado en el actual Cuartel 2 de este Regimiento, donde se mantuvieron recluidos
los considerados opositores a la dictadura; y el Casino de Oficiales de esta
Escuela de Ingenieros Militares, lugar donde se acreditó la realización de
sesiones de interrogación y tortura.”
En
representación de la Fundación por la Memoria de San Antonio hizo uso de la
palabra Isabel Soiza, quien en parte de su intervención manifestó: “Estamos hoy acá ejerciendo nuestro
derecho a la Memoria. Re significando este lugar. Estamos contentos por esto
por cierto, pero cabe preguntarse ¿por qué tuvieron que pasar 46 años? Cuarenta
y seis años tuvieron que pasar para marcar este sitio como parte de un rito de
reparación. Es necesario y urgente que nos hagamos cargo de nuestra
responsabilidad ética con la Memoria y los hechos históricos ocurridos en nuestra
ciudad (…) Tenemos la utopía de los viejos, la utopía de los jóvenes. Tenemos
la fuerza para derrotar la indiferencia. Tenemos la Justicia en el alma y la
vida por recordar.”
Posteriormente, a nombre de la Mesa Social de Cultura, Memoria y Derechos humanos de la V Región, la compañera Tehualda Tapia, integrante, además de la Colectiva “Bordadoras por la Memoria”, valoró el trabajo mancomunado que ha permitido ir cumpliendo estas importantes metas en materia de Derechos Humanos y en la recuperación de la Memoria Histórica, resaltando el hecho de que el Balneario Popular de Rocas de Santo Domingo, fue un sitio donde “el gobierno del compañero Salvador Allende cumple con la Medida N°29 de su programa”, que significó entregar una lugar de recreación y felicidad para las familias de obreros, pero, paradojal y siniestramente, nos dice “ese hermoso lugar donde solo cabía el amor, la felicidad y la esperanza, se transforma primero en un centro de adiestramiento para los torturadores más abyectos conocidos en Chile y el mundo, y luego pasa a ser una lugar de detención, tortura y muerte para cientos de compañeros y compañeras.”
La
ceremonia continuó desarrollándose en las afueras del Regimiento de Tejas
Verdes y a unos cincuenta metros de la Placa de Memoria, a la entrada de la
Escuela de Ingenieros, un grupo de militares realizaba trabajos al
interior del recinto y algunos de ellos, cada cierto tiempo, se detenían a
escuchar y mirar con curiosidad hacia el lugar donde se estaba realizando la
actividad.
El acto continuó
con la participación de la Colectiva “Círculo de Mujeres Agua Lunar”, en donde
María José, Marcela y Verónica realizaron una emotiva performance a tres voces,
leyendo dos textos y el poema “Somos Hijas del Dolor”.
Luego de esta declamación, Carolina Arce, en representación de la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, entregó un saludo reafirmando el compromiso de continuar este proceso de recuperar los sitios de memoria para que estén al servicio de toda la comunidad, agregando: “Las caras de todos quienes están aquí representan el trabajo incansable de recuperar la Memoria. Este proyecto está enmarcado en el principio de Memoria Histórica presente en el Ministerio de Cultura, las Artes y el Patrimonio, y este principio vigente hasta el día de hoy es el de reconocer a la Memoria Histórica como pilar fundamental de la cultura y del patrimonio intangible del país, que se crea, re-crea y proyecta a sí misma como un permanente respeto por los Derechos Humanos, la diversidad, la tolerancia y la democracia”
El
testimonio entregado por Ana Becerra, sobreviviente de los campos del horror de
San Antonio, emocionó fuertemente a las y los asistentes a esta ceremonia.
Transcribo a continuación algunos pasajes de su relato:
“Yo soy Ana Becerra, tengo 63 años, conozco este
lugar desde los 10 años. Solía venir a la piscina que quedaba dentro del
regimiento, durante algunos veranos, hasta que a los 17 años, este espacio que
era para mí un lugar de entretención, se transforma en un lugar de sufrimiento
al ser detenida el 16 de septiembre de 1973 (…) Durante la estadía en el Campo
las dinámicas de vida consistían en esperar el llamado para ser sacada a
tortura. Esto ocurría a cualquier hora, donde aparecía un militar con una lista
y a viva voz iba nombrando a los elegidos. Si te nombraban, te sacaban del
Campo hacia el camino entre el Campo y las edificaciones de los militares. En
ese momento aparecía una camioneta tipo frigorífico y nos encapuchaban, nos
amarraban y nos hacían subir a la camioneta. Ahí comenzaba el viaje hacia
la Escuela de Ingenieros Militares, más precisamente al subterráneo del Casino
de Oficiales, lanzándote a unas celdas húmedas, en espera del turno para pasar
a la sala de torturas. Las sesiones no tenían duración fija, pero me gustaría
aclarar que la violencia que recibimos las mujeres fue siniestra, primero por
la violencia sicológica, luego la física y finalmente la violencia sexual, solo
por el hecho de ser mujer (…) De esos días mis recuerdo más latente es la noche
en que los compañeros del MIR son sacados del Campo de Prisioneros sin saber su
destino, solo hasta hoy que sabemos que son parte de los Vuelos de la Muerte(…)
en marzo del 75, me vuelven a detener en Peñaflor, me van a buscar a la casa de
mis padres y antes de llegar a ningún lado me vendan los ojos con cinta
adhesiva, me suben a un auto, me ponen lentes de sol y emprendemos un largo
viaje. Al llegar a destino me bajan del vehículo y me doy cuenta que bajo mis
pies hay arena y a mí costado escucho el ruido del mar. Me recibe el
entonces Capitán Mario Jara Seguel, quien me recita o lee mi vida
política hasta el más mínimo detalle; no olvidemos que Jara Seguel fue la mano
derecha de Manuel Contreras (…) Al llegar a las cabañas inmediatamente fui amarrada
de pies y manos en la cama de un camarote y con un militar punto fijo a mi lado
(…) La vida transcurría entre torturas y amarras (…) Luego de estos 45 días fui
trasladada junto a otros prisioneros a Villa Grimaldi, de ahí a 4 Álamos y
posteriormente a 3 Álamos, desde donde salgo en libertad, pero con el plazo de
10 días para abandonar el país.
Concluyo hoy diciendo que en estos tres lugares de esta
provincia en donde estuve prisionera, que hoy vivo y habito, fue y sigue siendo
el “Triunvirato de la Muerte”. Luego de más de 40 años de sucedidos los hechos
podemos confirmar que Santo Domingo fue la escuela de formación en tortura de
la DINA.”
El
desgarrador testimonio entregado por Ana Becerra, constituye un ejercicio de
Memoria Viva que permite conocer parte de las atroces violaciones de los
Derechos Humanos y crímenes de lesa humanidad cometidos por agentes del Estado
al servicio de la dictadura cívico militar encabezada por Augusto Pinochet.
La presentación el grupo musical “Árbol Rojo”, formada por compañeros que siempre han estado presentes en las distintas actividades de Memoria y Derechos Humanos que se han realizado en San Antonio, permitió, de cierta manera, reponerse de las emociones provocadas al escuchar el testimonio anteriormente entregado.
Como parte
final de esta ceremonia, mujeres y hombres sobrevivientes del oscuro período
dictatorial, se acercaron hasta la Placa de la Enredadera de la Memoria para
proceder a destaparla e inaugurarla, depositando claveles en ella, mientras el
dúo musical “Cactus Andante” interpretaba algunas canciones como cierre de esta
acción viva de Memoria Histórica.
Guillermo
Correa Camiroaga, San Antonio 25 de mayo 2019
Juez ordena la detención de miembros en retiro de la Armada por aplicación de torturas a Sergio Vuskovic, exalcalde de Valparaíso
Publicado el 25 Mayo 2019
ESCRITO POR EL CLARÍN DE CHILE
SERGIO VUSKOVIC ROJO
El
ministro en visita extra ordinaria para causas por violaciones a los derechos
humanos de la Corte de Apelaciones de Valparaíso, Jaime Arancibia Pinto,
sometió a proceso y ordenó la detención de ocho miembros en retiro de la
Armada, por su responsabilidad en los delitos de detención ilegal, secuestro
con grave daño y aplicación de tormentos al exalcalde de la ciudad Abraham
Sergio Vuskovic Rojo. Ilícitos perpetrados en septiembre de 1973.
En
la resolución, el ministro Arancibia encausó a Guillermo Samuel Aldoney Hansen,
Eduardo Rigoberto Cruz Johnson, Ricardo Alejandro Riesco Cornejo, Rafael
Guillermo Mac Kay Backler, Alejo Esparza Martínez, Guillermo Tomás Morera
Hierro y Reginaldo Rebolledo López, en calidad de autores de los delitos de
secuestro con grave daño y aplicación de tormentos; y a Juan Enrique Gaete
Costabal por la detención ilegal del exalcalde.
En
la etapa de investigación de la causa, el ministro en visita logró establecer
los siguientes hechos:
“Conforme a los antecedentes pormenorizados precedentemente se ha podido
establecer que Abraham Sergio Vuskovic Rojo, fue detenido al mediodía del 11 de
septiembre de 1973, en el sector de Cerro Alegre, comuna de Valparaíso, por
personal de la Armada de Chile a cargo del teniente Juan Enrique Gaete
Costabal, luego de haber sido destituido de hecho como alcalde de esa misma
ciudad, cargo que ejerció hasta ese mismo día. Vuskovic Rojo fue trasladado por
Gaete Costabal hasta el Buque Escuela Esmeralda, por instrucciones de la
Primera Zona Naval, llegando al señalado buque ese mismo día a las 15:30 horas,
según consta en la bitácora de éste, y permaneciendo allí hasta el día 19 de
septiembre de 1973, para luego ser trasladado al campo de prisioneros de Isla
Dawson, región de Magallanes.
En el Buque Escuela Esmeralda, estuvo los primeros 3 días recluido en uno de
los camarotes destinados a los oficiales, lugar destinado a los detenidos de
alto rango político, y los 6 días restantes en el entrepuente de
guardiamarinas, lugar dentro del buque escuela donde mantenían a los demás
detenidos políticos. Durante estos nueve días, Vuskovic Rojo fue objeto de
constantes interrogatorios y aplicación de tormentos, como golpes de puño y
aplicación de electricidad en distintas partes del cuerpo, privación de sueño y
simulacros de fusilamientos por un grupo de agentes destinado para ello por el
CAJSI PRIZONA, conformado por Ricardo Alejandro Riesco Cornejo, Rafael Mackay
Bekler, Alejo Esparza Martínez, Guillermo Tomás Morera Hierro y Reginaldo
Rebolledo López, entre otros”.
En la resolución, el ministro Arancibia ordenó la detención de los procesados y su ingreso a recintos de la Armada en prisión preventiva.
Inauguran memorial en la ex Cárcel de Mujeres El Buen Pastor de Valparaíso
Publicado el 14 Mayo 2019
ESCRITO POR GUILLERMO CORREA
CAMIROAGA
El
proyecto de la Ruta de la Memoria de Valparaíso, iniciado hace dos años,
continúa señalando sitios de detención y tortura en la V Región como una acción
pedagógica de rescate de la Memoria Histórica, que tiene como objetivo mostrar
a las nuevas generaciones y a la ciudadanía en general lo sucedido durante la
dictadura cívico militar, para impedir el manto de olvido que se intenta
construir mediante la negación y/o el ocultamiento de los hechos, lo cual
representa una forma más de impunidad.
El pasado
11 de mayo se inauguró la novena Placa de la Enredadera de la Memoria en el
N°2614 de la calle Va Buren, lugar en donde funcionó la Cárcel de Mujeres
El Buen Pastor y que hoy es ocupado por el depósito y las oficinas
administrativas de los tradicionales trolebuses de Valparaíso y por una bodega
de alimentos congelados.
Alrededor de unas 150 personas participaron de un acto artístico testimonial en donde se relataron las insalubres y precarias condiciones carcelarias que vivieron decenas de Prisioneras Políticas al interior de este recinto, denunciando además la complicidad y el maltrato verbal efectuado por parte de las religiosas de la Congregación del Buen Pastor, y resaltando que durante el cautiverio nacieron dos niñas, Laura y Paloma, hijas de Presas Políticas, que permanecieron en prisión junto con sus madres.
Leslie
Olivares, quien estuvo detenida en este recinto carcelario, fue una de las
conductoras de este acto de reparación y al dar inicio a la ceremonia manifestó
que: “Nos reunimos en
este lugar para recordar, reflexionar y mantener viva la Memoria. Este
Memorial, que en un rato inauguraremos, es recuerdo imperecedero de vidas,
dignidades, cuerpos, familias y sueños. También huella latente de
desapariciones, muertes y torturas sistemáticas. En la Ex Cárcel de Mujeres
Buen Pastor de Valparaíso se registraron detenciones entre los años 1973 y
1988. La mayor cantidad de prisioneras se concentró el año 1974. Durante el
resto del período comprendido entre 1975 y 1977 disminuyeron, pero aumentaron
en la década del 80.”
Por su
parte, Danilo Ahumada, el otro conductor de este evento, agregó lo
siguiente: “Hoy
nos convoca el Colectivo de Ex Presas Políticas del Buen Pastor de Valparaíso y
la Mesa de Memoria, Cultura y Derechos Humanos, quiénes a través de un convenio
de colaboración y transferencia financiado por la Seremi de las Culturas, las
Artes y el Patrimonio de la Región de Valparaíso, han impulsado la Ruta de la
Memoria, inaugurando en distintos territorios de la Región de Valparaíso la
escultura “Enredadera de la Memoria”, del artista local Leandro Silva.
Esta acción de visualización comenzó hace dos años cuando se instaló la misma obra en el frontis del ex Liceo N°2 de Avenida Brasil, hoy Matilde Brandau de Ross; continuó con el reconocimiento en Isla Riesco, en Colliguay; Las Coimas, en San Felipe; Parque Cultural de Valparaíso-Ex Cárcel Pública; Playa La Ballena, Comuna de La Ligua, donde recordamos la memoria de la compañera Marta Ugarte; ex Cuartel Silva Palma, ubicado a los pies de Playa Ancha; Melinka-Puchuncaví; y recientemente, la Base Aeronaval de El Belloto.”
Luego de
esta introducción hizo uso de la palabra Alicia Zúñiga, integrante del
Colectivo de ex Presas Políticas de El Buen Pastor, organización que participa
en la Mesa Regional de Cultura, Memoria y Derechos Humanos, para, entre otras
cosas, expresar lo siguiente:
“Este es un momento muy importante para todas nosotras,
quienes estuvimos aquí en este lugar que está a mis espaldas, en lo que fue la
antigua Cárcel del Buen Pastor de Valparaíso. Indudablemente, en tiempos en que
se niega todo, en tiempos en que se quiere borrar la historia de nuestro país,
que se trastocan absolutamente los valores y los principios que hicieron que
hombres y mujeres tuvieran que pasar por las cárceles, por los campos de
concentración, que fueran muertos, asesinados, hechos desaparecer, en estos
tiempos que vivimos, es muy importante que nosotros podamos recuperar la
Memoria, nuestra identidad como pueblo(…) Lograr que se reconozcan, en forma
simbólica, aquellos lugares que fueron centros de detención y tortura, aquellos
lugares en que fueron asesinados hombres y mujeres en nuestro país, que
sean señalados para que las nuevas generaciones conozcan verdaderamente
la historia. Este esfuerzo es el que hoy se cristaliza con esta Placa, con esta
Enredadera de la Memoria, que es la Memoria fragmentada, dispersa, que nosotros
no nos cansamos por lograr unir.”
En esta Actividad de Memoria estuvieron presentes diferentes Organizaciones de Derechos Humanos provenientes de San Felipe, Quillota, Quilpué, Viña del Mar, Valparaíso, como asimismo autoridades regionales y representantes de organizaciones sociales y populares. A nombre de la Alcaldía Ciudadana intervino la Encargada de Patrimonio de la Municipalidad de Valparaíso, María José Larrondo, para entregar un reconocimiento a la labor desarrollada en el rescate de la Memoria Histórica y un saludo a nombre del Acalde Jorge Sharp. “Este proceso de contar la historia hace referencia la palabra resiliencia, que es una palabra muy bonita y que se refiere a salir de este dolor haciéndolo todosjuntos, porque este es un dolor que quebró al país, no es un dolor de cada una por separado”, manifestó.
Después de
estas intervenciones, la comprometida cantora porteña Bernardita González,
junto al guitarrista Orlando Silva, deleitó y emocionó a las y los asistentes
con su melódica voz cargada de sentimientos, comenzando su presentación con la
hermosa canción de María Elena Walsh “La Cigarra”, que inicia con las palabras
“Tantas veces me mataron/Tantas veces me morí/Sin embargo estoy aquí
resucitando…”
La
actividad continuó con un saludo entregado por Francia Jamett, encargada de la
Unidad de Memoria y Derechos Humanos de la Subsecretaría de las Culturas y las
Artes, quien en parte de sus palabras se refirió a la prisión política y
género, remarcando que “Lamentablemente
las cárceles y lugares en donde estuvieron detenidas mujeres y niñas han sido
invisibilizadas por la historia de la Prisión Política en Chile. Han sido las
propias mujeres, las Ex Menores, que se han agrupado, congregado, como acá,
para darle visibilidad.”
Las numerosas mujeres que estuvieron detenidas en la Cárcel el Buen Pastor de Valparaíso llegaron allí después de haber estado secuestradas y torturadas en otros lugares de la V Región, especialmente el Cuartel Silva Palma y la Academia de Guerra, en donde muchas de ellas sufrieron, además, brutales vejámenes sexuales.
Patricia
Pulgar, sobreviviente de estos recintos y ex Prisionera Política del Buen
Pastor, en el testimonio entregado durante la realización de este acto
manifestó:
“La Cárcel de mujeres el Buen Pastor fue administrada por
la Congregación del mismo nombre. Allí se recluyeron mujeres por razones de
orden político durante la dictadura cívico militar, luego de haber pasado por
distintos centros de tortura de las Fuerzas Armadas y de Orden, como el Cuartel
Silva Palma, Academia de Guerra Naval y barcos como el Lebu y La Esmeralda.
Este era un lugar de total insalubridad. Ocupábamos unos
cuartos que servían de dormitorio, tanto para las presas comunes como
para nosotras las presas políticas, con un nivel de hacinamiento mayor,
ya que en la pieza asignada a nosotras había 10 literas por lado más una litera
en el pasillo y dos cunas, una para Paloma y otra para Laura, hijas de nuestras
compañeras que nacieron estando sus madres presas(…) Las monjas pasaban sus
rondas haciendo comentarios, como “por meterse en cosas indebidas están aquí”,
o cuando una estaba leyendo decían “aprendan a tejer mejor en lugar de estar
leyendo leseras que le envenenan la mente”(…) El lugar, con dos baños
asquerosos para nosotras que llegamos a ser 40 o más, contribuía a que
apareciera sarna, piojos e infecciones varias. Una ducha con agua helada de la
cual casi no salía agua; una cocina que de higiene no tenía nada, y el famoso
patio de luz, inhóspito, lúgubre, helado, con su piso de cemento sucio(…) En
este lugar desastroso vivimos en una época en que nuestras vidas fueron truncadas
por la dictadura, en donde pasamos penas, dolores y frustraciones cuyas
consecuencias emocionales se manifiestan en diferentes momentos de la
vida hasta el día de hoy, y también donde hicimos amistades que perduran hasta
hoy, donde entendimos que nuestro sueño de luchar por un mundo mejor no estaba
errado. Por lo mismo, también supimos sobreponernos a las condiciones adversas
que se nos imponían y realizamos actividades culturales y creativas, que
buscaban desarrollar la solidaridad y la resistencia. Conocimos el mundo de las
presas comunes, lleno de injusticias y vejaciones, y tuvimos que aprender a
convivir con ellas y compartir, en aquel sórdido espacio (…) Porque creemos
firmemente que la historia la escribimos todas y todos, hoy perpetuamos
este lugar como Sitio de Memoria de un pasaje oscuro y aberrante de nuestro
país.”
Mientras
Patricia Pulgar entregaba su testimonio, una banda de guerra de un colegio que
volvía del desfile del mes de mayo, resonó fuerte en las calles aledañas a
donde se estaba realizando el acto, transformándose en un simbólico eco, que
como expresó Leslie al continuar conduciendo la actividad “cuesta olvidar esos sonidos que
están instalados en nuestra dolorosa memoria.”
La
participación del cantautor Rodrigo Sepúlveda, estudiante de Música de la
Universidad de Playa Ancha y oriundo de la localidad de Graneros, diluyó e hizo
olvidar los desagradables sonidos marciales de la banda estudiantil,
interpretando canciones de Silvio Rodríguez.
La
ceremonia concluye con la inauguración formal de este Sitio de Memoria por
parte de un grupo de ex Prisioneras Políticas de la Cárcel del Buen Pastor de
Valparaíso, quienes se dirigieron hasta el Memorial ubicado sobre la vereda,
portando flores en sus manos, para proceder a destapar la Placa de la
Enredadera de la Memoria y luego depositar claveles rojos sobre la misma.
Este Memorial ,como manifestó Leslie Olivares, es ”una contribución a la lucha por la Verdad, la Justicia y el rescate de la Memoria en nuestra ciudad, que permitirá relevar la violencia de género en su expresión política y, de esta manera, educar a las nuevas generaciones en los valores que otorga una cultura basada en el respeto a los Derechos Humanos.”
Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 12 de mayo 2019
Inauguración de memorial en Base Aeronaval El Belloto
Publicado el 06 Abril 2019
ESCRITO
POR GUILLERMO CORREA CAMIROAGA
“En el círculo de la vida somos presente, porque somos pasado y somos
futuro. No es posible escindirlo. No es posible el olvido. Olvidarse es perder
la memoria del futuro.”
( Elicura Chihuailaf, poeta mapuche)
Un nuevo recinto de la Armada de Chille, que funcionó como centro de
detención, tortura y muerte, fue señalado como Sitio de Memoria al instalarse
un Memorial en el lugar en donde funcionó la Base Aeronaval El Belloto en la
Comuna de Quilpué. Hasta el momento son ocho las Placas de la “Enredadera de la
Memoria” que han sido instaladas en distintos lugares de la región de
Valparaíso y que forman parte de la Ruta de la Memoria que continuará su
construcción, mediante la instalación de otros Memoriales.
Este Proyecto, que busca hacer visible ante la ciudadanía los recintos que
fueron utilizados por los uniformados para detener y violentar a miles de
chilenos y chilenas, así como también los lugares en donde fueron asesinados
numerosos compañeros y compañeras, se inició hace dos años con la instalación
de la primera Placa de la Enredadera de la Memoria en el frontis del Liceo N°2
de Niñas de Valparaíso, agregándose posteriormente los Memoriales de Colliguay,
Puchuncaví, Playa La Ballena, Sector Las Coimas, Cuartel Silva Palma, Ex Cárcel
de Valparaíso y el sábado 30 de marzo El Memorial en El Belloto.
El extenso paño de terreno en donde funcionó la base aeronaval El Belloto
fue desmantelado, destruido y vendido a empresas inmobiliarias, quienes
construyeron poblaciones y centros comerciales en dicho espacio, que hoy se
denomina como Belloto 2000, permaneciendo como único vestigio parte de la pista
de aterrizaje, transformada hoy en la Avenida
Centenario.
Precisamente, en una pequeña explanada ubicada en la parte alta de esta
calle fue el lugar en donde se instaló la Enredadera de la Memoria.
Alrededor de doscientas personas participaron de la ceremonia de
inauguración, entre las cuales se encontraban numerosos ex prisioneros y
prisioneras políticas, integrantes de organizaciones de derechos humanos y
sociales, familiares de asesinados durante la dictadura, como asimismo vecinos
y vecinas del sector.
Danilo Ahumada, conductor del acto, al dar inicio a esta actividad
manifestó:
“Nos reunimos en este lugar para recordar, reflexionar y mantener viva la memoria. Este Memorial, que dentro de un rato inauguraremos, es recuerdo imperecedero de vidas, cuerpos, dignidades, familias y sueños. También huella latente de desapariciones, muertes y tortura. La Base aeronaval de “El Belloto” comenzó a operar como campo de presos políticos durante la dictadura, el mismo 11 de septiembre de 1973. Por este campo de detención pasaron casi todos los detenidos de la región de Valparaíso, la mayoría de los cuales sufrieron torturas, violaciones y simulacros de fusilamiento. Inmediatamente después de su detención a los presos políticos se les vendaba los ojos, eran amarrados y golpeados. Una vez en el recinto eran recibidos con golpizas y apaleos. Algunos detenidos debían permanecer en un patio, a la intemperie, en una trinchera rodead de piedras y otros, en un hangar abierto, al lado de la cancha de aterrizaje. Algunos fueron obligados a permanecer tendidos en el suelo, con las manos en la nuca o en la cintura, inmóviles, privados de comida, agua, abrigo y sueño. Hoy nos convoca la Agrupación de Beneficiarios de la Ley de Reparación Política PRAIS-Quilpué y la Mesa de Memoria, Cultura y Derechos Humanos, quien a través de un convenio de colaboración y transferencia financiado por la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la Región de Valparaíso ha impulsado la Ruta de la Memoria, inaugurando en distintos territorios de la Región la “Enredadera de la Memoria”, del artista local Leandro Silva.“
Este recinto de la Armada en la V región se puede considerar, además de ser
un campo de detención y tortura, como un sitio de exterminio, ya que en este
lugar fue asesinado Jaime Aldoney, quien fue Regidor e Interventor de la
Compañía de Cervecerías Unidas durante el gobierno de la Unidad Popular, cuyo
cuerpo fue posteriormente hecho desaparecer, siendo uno más de los miles de
Detenidos Desaparecidos. También en este lugar fue asesinado Ramón Navia
Martínez, Dirigente de la Construcción, quien fue sometido a brutales torturas.
Otro caso relacionado con la Base aeronaval El Belloto es el del estudiante de
nacionalidad dominicana Juan Blanco Castillo, de 25 años de edad quien fue
detenido el 14 de octubre de 1973 y trasladado hasta la base aeronaval, apareciendo
seis meses después muerto el sector de Colliguay. El cuerpo de este ciudadano
dominicano no fue entregado a sus familiares y desde ese entonces se desconoce
el paradero del mismo, transformándose en otro Detenido Desaparecido.
Durante el transcurso del acto Lucía Saavedra, a nombre de la Agrupación de
Beneficiarios de Leyes de Reparación Política PRAIS-Quilpué,
manifestó, en parte de su intervención: “Los espacios que formaban la
Base Aeronaval de El Belloto desaparecieron aceleradamente, de un de repente.
Luego nos dimos cuenta que con la misma celeridad estábamos desapareciendo
nosotros. Conversamos con la gente de la Comuna y nos dimos cuenta que las
nuevas generaciones desgraciadamente no sabían nada de lo que había sucedido en
este espacio y en nuestro país, por lo tanto comenzamos a buscar todos los
vestigios que pudieran haber de la Base Aeronaval de El Belloto. Las nuevas
generaciones desgraciadamente no saben ni han tenido las clases de historia, o
que la historia realmente cuente lo que aquí ha sucedido. Pero aquí estamos
nosotros, viejos y todo, pero aquí estamos para declarar la verdad. Las
palabras del poete mapuche Elicura Chihuailaf, que encabezan esta crónica,
fueron leídas por Lucía Saavedra al final de su intervención.
También estuvieron presentes e hicieron uso de la palabra Paula Espinoza,
en representación de la Municipalidad de Quilpué y Carolina Arce, en
representación de la Seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio de la
región de Valparaíso, quienes entregaron un saludo, reconocimiento y respaldo a
esta iniciativa de rescatar de la Memoria Histórica, resaltando el valor que
tiene en cuanto a la promoción de los Derechos Humanos y la búsqueda de la
verdad, que son pilares fundamentales, junto con la aplicación de justicia, en
la lucha contra la impunidad.
Por otro lado, Alfonso Godoy, quien estuvo detenido en la Base aeronaval El
Belloto, entregó su testimonio, donde relató:
“ (…) De un momento a otro, a partir del 11 de septiembre, este fue un
centro de odio, de persecución, de tortura, de barbarie, de menoscabar la
esencia del ser humano. Aquí no solo se torturó físicamente, aquí se castigó,
como en otros lados, nuestra psiquis, quisieron exterminar no solo al ser
humano, sino que también lo que representábamos, nuestro pensamiento. Por
contar algunas cosas. Un día en una sala determinada al otro día llegó un
compañero detenido de la construcción, lo golpearon tanto, que murió, me
acuerdo de su apellido, compañero Navia, dirigente de la construcción. Había otro
compañero, de raza negra, un estudiante dominicano que lo acusaban de ser
cubano. Le enrollaron, perdonen la crudeza, le enrollaron papeles de diario en
la cintura y lo quemaron. Luego apareció muerto. Hay un juicio, donde soy
testigo, este compañero era de apellido Blanco.
(…) Ridículamente, para castigarnos, nos obligaban a hacer nuestras
necesidades fisiológicas en un busto del Che Guevara que lo sacaron de una
plaza vecina. ¿Qué ocurría con nosotros mientras tanto? Nos cuidábamos entre
nosotros, no importaba de qué línea política eras, éramos seres humanos, nos
trasmitíamos la esperanza de vivir, la esperanza de algún día salir.
(…) Fueron momentos súper duros, muy violentos, pero sin la ayuda que
nos brindábamos nosotros sin preguntar de qué lado eras, fue crucial para que
nos mantuviéramos, a lo menos, físicamente un poco más sanos, porque nadie pudo
entender después cuál era el daño psicológico que sufrían nuestras familias y
que sufríamos nosotros.
Éramos unos tipos jóvenes y ¿por qué nos tenían presos?, y esto vale la
pena entenderlo, porque nos habíamos sumado al gran sueño de una patria mejor y
por construir un país socialista, seguir el sueño de Salvador Allende, nuestro
mártir eterno.
(…) Hoy día quisiera tener la elocuencia de representar lo que
vivimos y lo que aprendimos aquellos que estuvimos presos, quisiera hacer un
homenaje para aquellos que cayeron, que fueron asesinados, nadie murió, todos
fueron asesinados por manos perversas que conocieron el odio y que nunca pudieron
entender que no solo éramos seres humanos, sino que éramos chilenos sanos, que
éramos capaces y queríamos sumarnos a la construcción de un país donde no
hubiera tanta pobreza y donde la distribución de la riqueza fuese más justa…”
Entremedio y al final de las distintas intervenciones, el cantautor Rodrigo
Sepúlveda, estudiante de Pedagogía en Educación Musical de la Universidad de
Playa Ancha, interpretó, acompañado de su guitarra, diversos temas musicales.
Como parte final de esta emotiva ceremonia se procedió a la inauguración
del octavo Memorial de la Ruta de la Memoria de la V Región.
La Enredadera de la Memoria quedó instalada donde un día funcionó la Base
Aeronaval El Belloto, constituyéndose en un silencioso grito de denuncia de las
atrocidades cometidas por personal de la Armada de Chile en dicho recinto.
Guillermo Correa Camiroaga, Valparaíso 5 abril 2019
A un mes del encuentro de camaradería en el Parque Cultural ex-Cárcel de Valparaíso. Abril 2019.
De izquierda a derecha: Luis Jorquera, Mario Cordero, Alonso Molinet, René Rojas, Guillermo Castillo, Carlos Alvarado, Jaime Salazar, Ramón Gonzalez, Ricardo Tobar. Al frente: Bernardo Flores y Pedro Blaset.
En el marco del rescate de la memoria colectiva sobre los acontecimientos relacionados sobre centros de torturas y prisión política, queremos revivir en este documental casi desconocido un lugar siniestro utilizado por la Armada de Chile de la época como centro de tortura.
Si bien en el primer “INFORME DE LA COMISIÓN NACIONAL SOBRE PRISIÓN POLÍTICA Y TORTURA” de la comisión VALECH página 360 se insinúa a “El Morro” como “Base El Morro” en Talcahuano, como un centro de torturas bajo el dominio de la Armada, no se describen detalles de lo que allí ocurrió, ni existen testimonios escritos.
El informe de la Comisión sobre la XIII Región, a pesar de que la mayoría de los Marineros Constitucionalistas detenidos, torturados y presos antes del golpe de Estado y reconocidos por la Comisión Valech , fija como fecha el 11 de septiembre el paso por los centros de tortura de los prisioneros políticos. Tenemos que esclarecer que los primeros torturados en esta región y en los centros que en el informe se mencionan, ya sea, Fuerte Borgoño, Cuartel Rodríguez, Isla Quiriquina, Fuerte Rondizzoni, fueron los Marineros Constitucionalistas primeras víctimas de las violaciones de los DDHH a partir de agosto de 1973.
El ex Secretario
General del Partido Socialista de Chile, luego de escapar de un país aplastado
por los militares lloró en los brazos de Erick Hoenecker cuando éste le mostró
un documental de la vencida Unidad Popular. “No se preocupe, ya va a pasar”, le
dijo. En efecto, parecía que lo peor ya estaba atrás: su amigo “Salvador” se
había reventado con la metralleta de Fidel Castro, la Casa de Gobierno humeaba
sus ruinas y por más que le advirtió a Carlos Prats de un posible atentado en
su contra, éste yacía muerto en Buenos Aires. Pero la cueca no había terminado
y ni el ficticio Plan Zeta pudo con lo que venía después. Altamirano era uno de
los hombres más buscados por la dictadura militar, según la portada de El
Mercurio del 26 de septiembre de 1973, donde aparece con sus lentes negros,
agitando “al pueblo” con ese mítico discurso en el Estadio Chile que le valió
el mote de “Bestia Negra”.
Era el responsable de
la intransigencia de la UP sellada en el “avanzar sin transar”. Querían, al
“Mayoneso”, porque era loco. Porque tenía la culpa de hacer sedición en La
Armada. Porque era un traidor a la clase. Y correlé, correlé , correlá, porque
si lo pillaban lo mataban. Según Michael Townley trataron de matarlo varias
veces, pero logró escapar y de la RDA se fue a vivir su exilio a París. Los que
se quedaron en Chile, murieron a toneladas y en la conciencia de Altamirano
penan los muertos cuando le preguntamos por sus amigos. Pero no quisimos hurgar
más en su dolor y en sus culpas, sino levantar su cabeza y mirar a través de
esa empingorotada nariz de ex aristócrata para ahondar en esa nueva picazón que
le recorre el alma: “La Bestia Negra” quiere una “Revolución de la Información”
para Chile.
LA BURBUJA
Amigos suyos dicen que usted es un gran conversador,
sin embargo para dar esta entrevista lo pensó meses ¿por qué tanto pudor?
Porque durante años la prensa mono-polizada de este país se ha empeñado en
distorsionar mi imagen. Y lo terrible es que un país no es civilizado ni
moderno cuando su prensa se fundamenta en las ideas de sólo un par de
propietarios, cuyas ideas son tan añejas como los dinosaurios. Una ex ministra
del régimen militar dijo que los chilenos vivíamos en una burbuja. Me gustó su
metáfora. Somos un país espantosamente provinciano.
¿Cómo se podría reventar esa burbuja?
Una prensa realmente libre. Hoy, estamos siendo moldeados por un solo tipo de
pensamiento. Los temas que se discuten en Europa, acá son inexplicablemente
vetados. Allá, por ejemplo es inconcebible el trato dado en Chile a dos
personajes intelectual, moral y políticamente opuestos: Pinochet y Tompkins. El
responsable de crímenes es defendido y el que intenta donar un parque es
vilipendiado.
¿Cree usted que el desarrollo cultural que la UP prometía
quedó estancado con el Golpe?
Llevamos casi once años de sistema democrático y no aprecio avances
sustantivos. El enorme prestigio democrático de que goza Chile en el exterior
no se condice con la realidad interna. Hasta hoy el señor Pinochet no ha sido
procesado. Todo es hipotético. Dicen que se habría suprimido la censura y al
parecer, se discutiría sobre el divorcio. Hablan de que se produciría una
reactivación económica. Pero hasta el momento hay censura, aún no se discute
sobre el divorcio y se mantiene el alto porcentaje de indigentes.
Pero también “dicen” que el progreso tocó nuestra
puerta…
Cuando más estaríamos ingresando a un mini clima moderno. Los que hemos vivido
en Europa sabemos apreciar la diferencia. Aquí ni su iglesia es moderna, ni sus
Fuerzas Armadas tienen mentalidad moderna, ni sus empresarios tienen ideas
progresistas, ni tampoco se emplea tecnología moderna. Hay que producir
televisores, barcos, aviones, ciencia. Un país que no produce eso no es
moderno. Un pueblo que básicamente explota minas y que vive de la producción
agrícola se asemeja más a lo que existió diez mil años antes de Cristo, cuando
se produjo la revolución neolítica. Desde entonces se cosechan frutas. Lo
nuevo, lo original, lo que cambió la historia de la civilización universal fue
la aparición de la industria. En 1900, Ford cambió el mundo. En el 2000, otro
norteamericano, Bill Gates, reinventó la tecnología e inició la nueva economía,
basándose en el conocimiento. En Chile estamos a años luz de siquiera imitar a
Ford.
Sería mejor saltarse la revolución industrial y pasar
derecho a la tecnológica, aunque… ¿qué hacemos con la neurosis colectiva?
Actualmente, veo una sociedad muy confusa, con enormes contradicciones. Aunque
el país duplicó su producto nacional (de 2.500 a 5000 dólares per cápita)
existen aún grados dramáticos de desigualdad. Las personas se sienten
estresadas y deprimidas. La gente vive en un estado de inconformidad y de
angustia muy grande. Y aún así no se ha profundizado suficientemente sobre este
extraño y paradojal fenómeno colectivo.
¿Y cuáles son sus angustias?
Las angustias son estados más propios de la gente joven. Los viejos entramos a
una especie de nirvana y esperamos, solamente. El esquivo desarrollo moderno no
llegó para nosotros, pero esperamos que a las nuevas generaciones no les baste
con el hipotético éxito económico, sino que exijan un real despegue ético,
cultural, político y una mejor calidad de vida. Hay, eso sí, que tratar de
imitar lo bueno y mejorar lo perverso. Usted puede ver, estamos en medio de una
polución atroz. En Santiago vive hacinada casi el 45% de la población nacional
con una miserable calidad de vida.
Y se le declara la guerra a Tompkins por intentar
proteger los bosques…
Ese es otro contrasentido monumental. Se le declara a Tompkins una guerra que
es una vergüenza para Chile. Hay diputados, alcaldes, ex presidentes
enfurecidos con él, porque pretende regalarnos un maravilloso parque, que
podría haber terminado en chips. De aquí a diez años llegarán aviones directo a
visitar ese “Santuario de la Naturaleza” único en el mundo.
¿Cree aún en las buenas intenciones?
¡Por supuesto! Aquí las malas intenciones son las de aquellos que arrasan los
bosques. No los que conservan árboles. Y esto no cabe en la mentalidad reaccionaria
de un sector minoritario del país, que es el que manda. El señor Tompkins,
entre otras cosas, defiende a los lobos marinos. Es cierto que estos animalitos
se meten a las redes de los criadores de salmones y se las rompen, pero ¿por
eso los matan? Ellos no pueden defenderse, no tienen prensa monopólica para
protestar.
MAYONESO
Hace un par de semanas hubo un lío entre Longueira y
el general Arancibia que pasó sin pena ni gloria. A usted ¿cuánto le ha pesado
el diálogo que tuvo con un sargento, días antes del Golpe?
Impúdicamente un jefe de partido negocia con el comandante en jefe de la Marina
un cupo senatorial y en cambio a mí hasta el día de hoy me han perseguido por
entrevistarme con un modesto sargento, Juan Cárdenas, quien vino a denunciarme
la preparación inminente del golpe de Estado. Este sargento quería hacerme
saber a mí y a Oscar Guillermo Garretón que el complot ya estaba en marcha, que
venía el Golpe de Estado. Por denunciar esta situación me convertí yo en “el
sedicioso” y los golpistas en “salvadores”. ¿Por qué iba a querer yo la
rebelión de la Marina
en contra del gobierno legítimo de Salvador Allende? ¿Y cómo podía pretender
sublevar a la Marina valiéndome de un sargento y un marinero?
¿Qué pasó con ese sargento y ese marinero?
Fueron horrorosamente torturados para que confesaran que Oscar Guillermo
Garretón y yo les habíamos pedido la entrevista, pero ellos jamás aceptaron
hacer tal declaración. Ellas fueron denunciadas por el cardenal Silva
Henríquez y Radomiro Tomic. Después supe que Cárdenas andaba en Suecia y que
quiso conversar conmigo, pero no logramos encontramos. El país está en deuda
con esos marinos que advirtieron el Golpe y pretendieron oponerse. Fueron los
primeros combatientes a favor de la democracia y ese es el “Pago de Chile” que
recibieron a cambio.
La derecha le apodó “El Mayoneso”, porque según ellos
a usted le faltaba cordura ¿se considera medio loco, don Carlos?
La gente inteligente suele ser un poco loca. No hay tontos locos. El título de
“El Mayoneso” me lo puso la derecha con su enorme poder publicitario e
ideológico. Investigaron por dónde podían atacarme. Resulta que en ese tiempo
yo iba mucho a la televisión y no podían imputarme ignorancia o deshonestidad.
Yo ni salí millonario, ni me quedé con ninguna empresa. Esa es más señal de
tonto que de inteligencia, pero bueno. No me podían atacar por ese lado. Mis
escasísimos bienes fueron prolijamente investigados bajo la dictadura militar.
Lo que no se ha hecho con ninguno de ellos. En fin, no tenían por donde atacarme,
de modo que inventaron y difundieron la imagen del loco.
¿Ha cambiado la derecha desde aquellos tiempos?
Su núcleo duro se ha vuelto mucho más reaccionaripo y prepotente. Hoy día son
los dueños del país y sólo le temen Estados Unidos.
¿De qué vive?
De dos jubilaciones. Una chilena que se me negó por años y años, porque
alegaron que yo no tenía derecho y una francesa, donde trabajé cerca de veinte
años. Vivo bien, aunque para algunas personas la suma es miserable. Yo no me he
incorporado al mundo de los que tienen que tener éxito material. Yo me cago en
ese tipo de éxito.
¿Qué le queda de ese aristócrata “que miraba sobre el
hombro”? o definitivamente se siente ¿un “desclasado”?
Yo nunca he mirado sobre el hombro…
Pero usted es un “pije”…
Usted lo ha dicho. Estoy muy orgulloso de mi origen social, porque mis padres
eran personas de gran cultura y de una honradez intachable. Por lo demás, yo no
elegí mi clase social, pero sí mis ideas. Entre paréntesis, tampoco es tan
cierto mi origen aristocrático.
¿Este gobierno socialista se parece en algo al
socialismo de sus ideales?
No. Pero eso no es culpa del gobierno, sino mía.
¿Suya?
Con otros amigos fuimos los primeros en iniciar la renovación del socialismo
chileno, pero no coincido precisamente con lo que hoy se considera “renovación
del socialismo”. No creo que los diez mandamientos de la vulgata marxista hoy
día tengan igual validez que hace un siglo y medio, pero sigo creyendo en la
existencia de una moral en principios éticos socialistas.
MIRE PARA ATRÁS
Si usted tuviera el poder¿cuál sería su primera
decisión?
El Estado debe subvencionar prensa, revistas y programación con ideas diversas.
El chileno diariamente está oyendo, leyendo y mirando un tipo de información
falsa, manipulada y decadente con lo cual no podrá existir una opinión pública
culta e informada ni tampoco el país podrá entrar definitivamente a la
modernidad.
¿Usted vota por una revolución de la información?
Sí, como lo dijera Gramsi, el gran teórico marxista italiano: Más que una
revolución económica o social, se requiere una “revolución intelectual y
moral”.
¿Cómo le gustaría que lo recordara la gente?
Como un hombre que luchó con honestidad por sus ideales.
¿Cuánto le duelen esos hombres que murieron por sus
mismos ideales?
Me han dolido y penado durante los largos años que ya han transcurrido, porque
después de todo, a la enorme mayoría los conocí, los aprecié y los quise. Eran
mis amigos y compañeros. Muchos de ellos adoptaron posiciones políticas y
entusiasmo llevados por mi impulso. Por eso me siento culpable de muchas de
esas muertes y de lo mal que lo pasaron esos miles de asesinados, torturados y
desaparecidos. Es algo que me pesa y carga sobre mi conciencia, aunque yo no
sea el responsable.
¿En qué dejó de creer?
Venimos de publicar un libro con un joven amigo, Hernán Dinamarca, que se
titula: “Después de todo: Conversaciones sobre los cambios de época”. Allí
están contenidas mis ideas fundamentales acerca de esta colosal mutación
histórica y podrá entenderse por qué sigo creyendo en algunas cosas y en otras
no. Reducir estas 350 páginas a cuatro frases no me resultaría fácil. Pero
“después de todo” no he aparecido en un palacio, dueño de una empresa y
paseando en un yate.
Retrocediendo más aún en la historia, ¿cree que
Allende se suicidó?
Allende terminó suicidándose, pero, ¿en qué circunstancias? ¡Estaban
bombardeando La Moneda! ¡Lo querían asesinar! Antes de quedar lisiado por las
bombas y humillado por los militares, optó por el mismo sacrificio heroico de
Balmaceda.
Mire para atrás don Carlos…
¡Qué Horror!
Sentado en el mismo
salón donde ocurrió esta entrevista, atrás de nosotros, estaba Sergio Onofre
Jarpa sorbiendo a tragos cortos un café de grano. Dado el episodio, Carlos
Altamirano, quiso retirarse y decidió no almorzar en el restorant japonés del
Hyatt, donde lo habían citado para una reunión. Por su parte, el imponente ex
ministro del gobierno militar, se encaramó a un auto con vidrios polarizados
cuya patente de iniciales NN se perdió entre el tránsito de la Avenida Kennedy.
Este
jueves 25 de abril se publicó en el Diario Oficial la Ley 21.154 que designa al
Instituto Nacional de Derechos Humanos como el Mecanismo Nacional de Prevención
Contra la Tortura y otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes
(MNPT).
Dicha norma se sitúa en un contexto mundial orientado a establecer mecanismos
efectivos de prevención y protección frente a situaciones de tortura, en
lugares donde se pudieran encontrar personas privadas de su libertad,
reservadas a la vigilancia del Estado o con su consentimiento expreso o tácito.
El antecedente que gatilla este hito es la aprobación del Protocolo Facultativo
a la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura por parte del Estado
de Chile, que se publicó en 2009, exigiendo dicho instrumento que a más tardar
un año después se su entrada en vigor se debía instalar un mecanismo como el
que hoy se regula en esta nueva ley. Por tanto, hoy se cumple un compromiso con
el que nuestro país estaba al debe desde hace casi una década.
La designación de radicación del Mecanismo Nacional de Prevención contra la
Tortura en el INDH cumple con los requisitos establecidos en los Principios de
Paris sobre el estatuto de las instituciones nacionales de promoción y
protección de los derechos humanos.
Se destaca entre las principales funciones que desarrollará el MNPT, la de
examinar periódicamente las condiciones de las personas privadas de libertad y
el trato que reciben, así como realizar visitas periódicas preventivas no
programadas y de monitoreo a los lugares de privación de libertad. Asimismo,
podrá el MNPT realizar recomendaciones a las autoridades competentes del
servicio responsable del lugar de privación de libertad, o al representante
legal de las personas jurídicas de derecho privado.
El Comité de Expertos/as será integrado por siente miembros elegidos/as por el
Consejo del Instituto Nacional de Derechos Humanos y seleccionados/as por
concurso público, efectuado por el Sistema de Alta Dirección Pública del
Servicio Civil.
La ley establece también el deber de colaboración de las autoridades
competentes del Estado, que deberán considerar las recomendaciones e informes
elaborados por el Comité, entablando un diálogo acerca de las posibles medidas
de aplicación.
Respecto de la promulgación de la legislación, Consuelo Contreras, directora
del INDH, sostuvo que “valoramos el esfuerzo que hizo el Estado de Chile
para combatir este crimen, dado que la tortura es una realidad que persiste en
Chile en lugares de detención y al interior de instituciones penales o de
privación de libertad”.
La Directora del INDH afirmó también que “valoramos el apoyo transversal que
este proyecto tuvo por parte del Gobierno y del Congreso como órganos
colegisladores. Tras dos años de tramitación, con una importante presencia e
incidencia legislativa del INDH, fue despachada una ley que permite avanzar en
los compromisos internacionales adquiridos por el Estado en materia de
prevención de la tortura”.
A lo anterior, Rodrigo Bustos, Jefe de la Unidad Jurídica Judicial del INDH,
complementó que “al visibilizar y realizarse un monitoreo periódico de los
espacios y lugares destinados a mantener personas privadas de libertad mediante
el acceso de observadores independientes, se pueden prevenir situaciones que
vulneren la integridad psíquica o física”.
“Destacamos el concepto amplio de lugares de privación de libertad que regula
la ley puesto que ello permitirá un desarrollo pleno de las funciones de los
expertos y expertas del Mecanismo Nacional de prevención contra la Tortura”,
agregó Bustos.
Cabe recordar que la tortura es una de las más graves violaciones a los
derechos humanos, cuya prohibición es absoluta tanto en los ordenamientos
internacionales como en la legislación nacional.
El INDH, además de haber realizado desde sus inicios un monitoreo de las
condiciones de detención en diferentes lugares de privación de libertad, ha
realizado reiteradas recomendaciones respecto de la necesidad de investigar,
sancionar y reparar a las víctimas de los casos de tortura ocurridos en
dictadura, así como los que han seguido ocurriendo en contexto de democracia.
También desde hace dos años el INDH ha coordinado una mesa interinstitucional
que ha procurado que diversos organismos del Estado puedan aunar sus esfuerzos
en estas materias y adoptar medidas para mejorar los registros estadísticos de
estos casos, revisar los protocolos de actuación y fortalecer las
capacitaciones a sus funcionarios y funcionarias.
El Décimo Séptimo Juzgado Civil de Santiago condenó al fisco a pagar una indemnización total de $155.000.000 (ciento cincuenta y cinco millones de pesos) a Teodosio Cifuentes Rebolledo y familia. El suboficial en retiro de la Armada fue víctima de torturas entre 1973 y 1976.
En el fallo, la magistrada Rocío Pérez Gamboa ordenó el pago de la indemnización, tras establecer que el excabo segundo de la Armada fue víctima de crímenes de lesa humanidad en perjuicio, el suboficial formó parte del grupo denominado “Marinos Constitucionalistas”, por lo que fue sometido a vejámenes desde agosto de 1973 a octubre de 1976, en recintos de la Armada.
“Que son hechos establecidos en la causa, al no haber sido controvertidos por las partes y por encontrarse además acreditados con el mérito de la instrumental producida por la demandante, de conformidad a lo prescrito por los artículos 1700, 1702 y 1706 del Código Civil, y la prueba testimonial reseñada en el motivo 10°, que en agosto de 1973, don Teodosio Cifuentes Rebolledo, de 26 años de edad, cabo 2° de la Armada de Chile, casado con doña Rosalía Delgado Naranjo y padre de un hijo Roberto Cifuentes Delgado y de otro por nacer (Claudia Cifuentes Delgado), junto a otro grupo de marinos, tomó conocimiento de los intentos golpistas por parte de oficiales de la Armada de Chile, razón por la cual decidieron informar el hecho a las autoridades políticas y administrativas del país, por lo cual padeció una intensa persecución en su contra por parte de las autoridades militares de la época, siendo detenido por primera vez el 6 de agosto de 1973, por infantes de marina, quienes lo golpearon para llevarlo al cuartel Silva Palma, en Valparaíso”, consigna el fallo.
La resolución agrega: “Que, asimismo, durante este periodo, su cónyuge Sra. Rosalía Delgado, junto a su pequeño hijo, y embarazada de su otra hija, concurrió a la escuela de submarinos, donde supuestamente se encontraba su marido, indicándole que este se encontraba detenido, comenzando también para ella y sus hijos un calvario por la detención de su marido y padre respectivamente”.
“Luego –continúa–, desde el 30 de septiembre de 1973 al 25 de octubre del mismo año, estuvo detenido en la Cárcel Pública de Valparaíso, para ser trasladado a la Isla Melinka durante 1 año, donde fue torturado. Luego, el 25 de junio de 1974 fue llevado a Puchuncavi de la Marina donde estuvo por un mes, para finalmente ser conducido a la Cárcel Pública donde fue torturado y estuvo hasta el 4 de octubre de 1976, fecha en que fue liberado”.
Sobre la excepción de prescripción extintiva, incoada por la demandada, “huelga tener presente que el hecho que motiva esta acción, es de aquellos que la doctrina y tribunales superiores de justicia reconoce como graves crímenes de lesa humanidad, tal y como lo establece los Convenios de Ginebra del año 1949, toda vez que estos hechos y especialmente los descritos en los motivos 12° y 13° ocurrieron en un contexto de excepción a nuestra democracia, período en que se vulneraron de manera grave, sistemática y masivamente los derechos humanos de las personas oponentes al régimen de entonces o a simples civiles que no adherían a ningún movimiento político, con el único fin posible de amedrentar al resto de la población civil, todo ello cometido por agentes del Estado o por civiles amparados por éste”, afirma el fallo.
“(…) dado que los Derechos Humanos reconocidos en la Convención son inherentes al ser humano durante toda la existencia de éste, no es posible sostener a juicio de esta sentenciadora que un Estado pretenda desconocer la reparación necesaria y obligatoria por el mero transcurso de éste, ya que ello significaría desconocimiento del Derecho Humano conculcado”, concluye.
La Comisión de Verdad y Reconciliación publicó el Informe Rettig el 8 de febrero de 1991, solicitando al Estado de Chile, entre otras medidas, realizar gestos de reparación simbólica con el objeto de reivindicar a las víctimas, recordar lo sucedido durante la dictadura y evitar que estos hechos volvieran a repetirse.
La Comisión Valech, sobre Prisión Política y Tortura, en noviembre del año 2004, recomendó declarar “los principales sitios de tortura como monumentos nacionales y la creación de memoriales y sitios recordatorios de las víctimas de violaciones a los derechos humanos y violencia política”.
Desde el primer informe han pasado casi 30 años y la deuda del Estado en esta materia aún está pendiente. El Informe Anual de Derechos Humanos 2018, elaborado por el INDH, en su capítulo sobre “Sitios de Memoria y su contribución a la no repetición”, detalla una serie de dificultades de diversas organizaciones en la recuperación de inmuebles, utilizados en la comisión de violaciones a los derechos humanos entre los años 1973 y 1990, que todavía permanecen en manos de las Fuerzas Armadas y de Orden.
El estudio de carácter exploratorio analizó, entre otras materias, la respuesta del Estado respecto a las políticas públicas sobre Sitios de Memoria a través de una encuesta digital realizada a 21 organizaciones, entrevistas a directivos de instituciones que trabajan en temas de memoria y el cruce de información disponible de diversas entidades públicas como el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, la Subsecretaría de Derechos Humanos y el Ministerio de Bienes Nacionales.
Los integrantes de diversos sitios de memoria -lugares que recuerdan hechos vinculados a violaciones sistemáticas y generalizadas de derechos humanos, cuyo presente interpela a la sociedad sobre hechos ocurridos en el pasado-, coinciden en que uno de los aspectos más complejos que han debido enfrentar tiene que ver con la destrucción de los espacios físicos, las dificultades para recuperar los inmuebles y la restricción de acceso que imponen las diferentes ramas de las Fuerzas Armadas y de Orden Público.
Miguel Lawner, arquitecto y ex preso político, manifestó en un seminario internacional el año 2017 su inquietud respecto a que la demolición de inmuebles del Ejército no sólo afecta su eventual transferencia, sino también su utilización “como medio de prueba para conocer la verdad”.
La falta de recursos humanos y financieros, coinciden los especialistas entrevistados, ha derivado en una actuación reactiva por parte del Estado y sus órganos técnicos, que se han limitado a tramitar las solicitudes presentadas por organizaciones de derechos humanos ante el Consejo de Monumentos Nacionales impidiendo que muchos sitios no recibieran una protección oportuna. José Piga, experto en conservación y restauración de monumentos, asegura en el informe que algunos casos terminaron en la destrucción de los inmuebles por parte de sus nuevos propietarios con evidentes “intereses políticos”, como sucedió con la Casa Memoria José Domingo Cañas (Ex cuartel Ollagüe de la DINA), ubicada en la comuna de Ñuñoa.
En la actualidad se ha logrado recuperar el 46% de los inmuebles protegidos por la Ley de Monumentos Nacionales para sitios de memoria y se ha entregado protección legal a 40 centros de detención y tortura utilizados durante la dictadura, gracias al arduo trabajo de diversas agrupaciones de derechos humanos durante los últimos 22 años.
Los registros más altos de visitas mensuales a sitios de memoria durante el año 2017 lo encabezaron Londres 38 con 2.380 visitantes y Villa Grimaldi con 2.042, relevando la importancia que tienen estos recintos en materia de educación y cultura en derechos humanos. El promedio de visitas a nivel nacional en estos espacios de memoria es de 406 visitantes al mes, mientras aquellos que siguen en manos de las Fuerzas Armadas, y que cuentan con protocolos de acceso durante algunos días, registran apenas 21 visitas en el mismo periodo.
La escasa colaboración de las Fuerzas Armadas, desafiando la jurisprudencia internacional y los marcos que rigen las políticas en materia de verdad, justicia y reparación, es otra de las barreras detectadas en el Informe. También la falta de voluntad política de los gobiernos, asegura Romina Ampuero, integrante de la Red de Sitios de Memoria, “para enfrentar decididamente a quienes buscan que los hechos ocurridos queden en el olvido”.
El diagnóstico realizado en el Informe elaborado por el INDH no sólo concluye el escaso esfuerzo del Estado en responder a las demandas de las organizaciones respecto a los sitios de memoria, sino también la inexistencia de una política pública de protección para estos recintos y de un órgano competente para coordinar y planificar “las acciones necesarias para ejecutar las propuestas de patrimonialización de inmuebles emanadas de la comisión Rettig y Valech”. La escasez de recursos del Ministerio de Bienes Nacionales para adquirir propiedades es otro factor que ha impedido la recuperación de centros de detención y tortura utilizados en dictadura, encontrándose hoy en manos de personas y entidades de derecho privado.
Recomendaciones
En virtud de los compromisos y obligaciones adquiridos por el Estado de Chile, el Instituto Nacional de Derechos Humanos recomienda al Ministerio de Defensa y al Ministerio del Interior y Seguridad Pública que soliciten la entrega de los inmuebles fiscales utilizados en la comisión de delitos en contra de los derechos humanos en la dictadura, a las Fuerzas Armadas y de Orden Público y Seguridad. El objetivo es que estos recintos puedan ser habilitados como sitios de memoria para el desarrollo de actividades pedagógicas que contribuyan a la no repetición de hechos de esta naturaleza. Se recomienda, además, que los organismos cumplan con las acciones comprometidas con el Plan Nacional de Derechos Humanos, respecto a la colocación de placas y la creación de protocolos de acceso a los sitios de memoria que se encuentren bajo su jurisdicción.